Los riesgos y consecuencias financieras de la pandemia del COVID-19 para el sector empresarial, especialmente para las PyMEs y los exportadores, han hecho aún más importante el acceso a capital de trabajo y la liquidez. En este marco, las solicitudes de factoraje han incrementado hasta en 50%, de acuerdo con datos de Drip Capital México, fintech especializada en financiamiento internacional.

Según explica Edmundo Montaño, director general de la fintech, con base en el promedio de su cartera de clientes —empresas que exportan cerca de 5 millones de dólares al año y que reciben sus pagos en 60 días—, los requerimientos de las Pymes exportadoras son de alrededor de 800 mil dólares en capital de trabajo, a lo que se suma la necesidad en términos de producción e inventario.

En el contexto actual, una encuesta reciente del Banco de Pagos Internacionales entre 40 mil firmas internacionales revela que hasta la mitad de las empresas no cuenta con el efectivo suficiente para cubrir sus costos en el transcurso del año.

“Esto ha generado un creciente interés hacia el financiamiento y, de entre las alternativas, __el factoraje presenta ventajas relevantes que resuelven los problemas comunes del ciclo de conversión de efectivo y del acceso a fuentes de capital__”, apuntó Montaño.

El reto a resolver, asegura el directivo, es que incluso cuando la recuperación del mercado comience o las ventas internacionales de los exportadores se mantengan, los compradores acentuarán la necesidad de plazos de crédito, lo que retrasaría hasta 180 días la entrada de efectivo.

“Sumado a esto, persiste el riesgo de que hasta 80% del flujo de capital de las MiPyMEs, sobre todo de las exportadoras, se encuentra concentrado en uno o dos clientes, por lo que ante algún fallo administrativo, retraso en pagos u otras eventualidades propias de la pandemia, __aumentará la probabilidades de que muchas empresa terminen por caer en insolvencia o hasta cerrar definitivamente__”, agregó Montaño.

La brecha de acceso a financiamiento para las Pymes complica aún más el panorama: hasta un 58% de estas unidades económicamente activas son rechazadas por las instituciones bancarias al solicitar un crédito o financiamiento, de acuerdo con la última Encuesta Global sobre Financiamiento al Comercio de la Cámara Internacional de Comercio (ICC, por sus siglas en inglés).

En cambio, según información de la plataforma de Drip Capital, la mitad de los exportadores que aplican a su factoraje se les aprueba una línea de crédito para adelantar en el mismo día del envío hasta 80% del valor de sus facturas de exportación y en un periodo promedio de tres meses de financiamiento fintech de factoraje, hasta 90% de las PyMEs logran cubrir la totalidad de sus facturas por gastos operativos.